Prólogo

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¿Es necesario ir a una biblioteca para dar con el tema idóneo para un discurso? No necesariamente. Puedes redactar tus propios temas a partir de una investigación diligente respecto de cualquier asunto de tu interés.

Todos los temas de esta sección contienen razonamientos, discursos e ideas relacionadas con las enseñanzas que se muestran en este app. Los he redactado personalmente en el curso de varias décadas.

Algunos títulos te parecerán repetitivos. Se debe a que son artículos escritos en diferentes épocas pero compilados en el app por si deseas tenerlos en cuenta. 

Han sido escritos para ayudarte a enfocar cada vez mejor tu oratoria, tu motivación y la manera como motivas a los demás, cómo enfocas tus relaciones humanas y la forma como vendes tus ideas.

¿Alguna vez trataste de ayudar a una persona pero no funcionó, sino que terminó peor de lo que pensaste? ¿Te preguntaste si hubieras podido hacerlo mejor y producir mejores resultados? ¡Claro que pudiste haberlo hecho mejor! Siempre se puede mejorar.

Cuanto más leas, más amplio será tu fundamento

Uno nunca termina de aprender, y uno nunca deja de mejorar, a no ser que se estanque por negligencia. El estancamiento resulta de perder interés.

Por eso, todos estos temas renuevan tu interés permanentemente. No creo que termines de leer todo. Comienza por donde quieras y termina por donde quieras, ¡pero mantente estudiando!

Selecciona un tema de tu interés, léelo y examínalo completamente. Luego, sin importar cuán extenso haya sido, pódalo extrayéndole las cosas que más te hayan interesado, resúmelo en pocas palabras y preséntalo en voz alta en solo 60 segundos. Finalmente, redáctalo en tus propias palabras y consérvalo como un registro, pero no lo digas exactamente igual cuando hagas la presentación. Siéntete libre de usar las palabras que broten de tu corazón en el momento. Lo importante es que tengas las ideas claras en tu mente y corazón.

Muchos de ellos contienen a propósito mucha más información de la que puedes decir en 1 minuto. La finalidad es que tengas una base amplia para entenderlo y explicarlo. Además, te servirá para ejercitar tu habilidad para resumir.

No es una base de datos enciclopédica acerca de todo lo que pueda decirse sobre cada uno de los contenidos, sino solo para darte material para exponer discursos de práctica.

Debes verlos simplemente como modelos para que veas cómo organizar y estructurar las diferentes partes de un discurso.

Todos tenemos diferentes maneras y estilos para introducir un tema, desarrollarlo y concluirlo.

Muchos quisieran que les dé discursos preparados sobre diferentes temas sociales, poner palabras en su boca. Pero ¿no será que lo único que buscan es repetirlos de memoria, que los aplaudan y cosechar los beneficios sin haberse esforzado por mejorar personalmente su oratoria? Donde yo crecí se le llama: "Hacerle la tarea al niño".

Pero sí puedes analizar mis formas y aplicar cualquiera de los diferentes estilos a cualquier tema de tu propia creación.

Si no te basta, en la sección "Redacción" hallarás algunos modelos interesantes bajo los links "La descripción", "La oración", "Ilustrando el pensamiento" y "Ejemplos". Simplemente observa su estructura y haz algo parecido con tus propios temas y discursos.

Cómo hallar temas especializados

Ten en cuenta que los temas que aquí comparto contigo se basan en principios y técnicas de motivación, oratoria, relaciones humanas y ventas, y que el propósito principal por el que los he subido al app es ayudarte con ideas para preparar tus propios discursos breves.

Para otros temas y modelos puedes enriquecer tu propia base de datos a partir de páginas especializas publicadas en Internet por organizaciones confiables de carácter enciclopédico.

Por ejemplo, si vas a hablar sobre la "Dispepsia", ve a Google o Yahoo y busca "Dispepsia". El sistema te abrirá un abanico de páginas para iniciar tu investigación.

Cómo preparar un tema propio

Los diccionarios definen "tema" como un "texto o proposición que sirve de materia prima para un discurso". De hecho, un discurso "temático" es un conjunto de subtemas entrelazados por un tema general. Ahora bien, ¿cómo conseguir un tema para un discurso u oratoria?

Recuerda esto: Cualquier idea que te despierte pasión y provoque el desarrollo de un asunto en tu mente y corazón siempre es buen material para hablar en público.

No es un buen tema para ti si no te despierta ni provoca ningún sentimiento en tu interior.

¿Cómo lograr que un tema te despierte emociones? Bueno, un tema propio debe tratar de cosas que te gustan o cosas que detestas, a fin de hablar a favor o en contra de ellas.

Si vas a mencionar alguna palabra o frase cuyo significado o definición no entiendes muy bien, ten presente que es muy probable que algunos de tus oyentes tampoco la entiendan bien. Eso quiere decir que podría ser un excelente tema. ¿Por qué? Porque nada es más placentero que oír una explicación novedosa acerca de algo que uno no entendía bien.

En tal caso, ve a Internet y extrae toda la información posible. Por ejemplo, ¿Qué significa que uno se quede inerte? ¿Qué es la inercia? ¿Qué es una persona paradigmática? ¿Qué es un paradigma? ¿Qué es un resumen escatológico? Citar, reflexionar, y explicar el significado de una palabra o frase es un recurso muy eficaz para crear un tema.

Hay incontables significados, definiciones, frases literarias, citas célebres, refranes, biografías, historias, cuentos, fábulas y leyendas que pueden servirte de materia prima, tanto para motivarte a hablar de algo como de motivar a tus oyentes.
Una boda, una bienvenida, una despedida, un funeral y otras ocasiones especiales son ocasiones para preparar un discurso. Pero tienes que prepararlos con base en tus sentimientos, no los de otra persona. No te recomiendo prepararlos con base en los sentimientos de otro.

Las ideas que te ofrezco en esta sección abarcan temas generales y sencillos para que puedas modificar palabras y frases y adaptarlos a la ocasión que juzgues conveniente.

Algunas personas poco experimentadas suponen que un discurso debe contener expresiones rimbombantes, palabras rebuscadas y estilos poéticos que despierten profundas emociones. No es así.

Tu oratoria es y debe ser siempre autobiográfica. Cada orador tiene su propio estilo, el cual brota de su propia mente y corazón. Si tu carácter y personalidad te permite desplegar un estilo poético, puedes hacerlo. Te saldrá muy bien. Pero no sería recomendable que lo hicieras si tu personalidad no te ayuda. Tus expresiones sonarían falsas y ridículas.

Siempre es mejor la sinceridad expresada con sencillez. Tienes que sentir comodidad con tu discurso y en pleno control sobre tu presentación. Eso no se consigue hablando con la boca de otro.

Buscador de FreeFind

El link "Artículos" del menu te lleva al "Archivo". Hallarás un buscador en la parte superior. Abrirás un sin fin de páginas con muchas ideas.

¿Cómo enfocar cualquier tema?

En general, menciona el asunto, palabra, proverbio o refrán en que te apoyas. Luego, di: "Por ejemplo" y menciona un caso específico. Diles por qué es útil y termina dando una orientación o guía breve.

Cómo proceder al citar porciones de texto exactas pertenecientes a otras personas

Al investigar cualquier clase de fuente de material para preparar o enriquecer un discurso, puedes reunir dos o más artículos relacionados, extraer un resumen y enfocarlo desde diferentes ángulos, un análisis personalizado, y pulirlo y presentarlo. Pero si citas algo textualmente, es decir, palabra por palabra, debes mencionar el autor y/o la fuente, o por lo menos decir: "Recuerdo que alguien dijo una vez...".

La habilidad para la oratoria no es inyectable ni telepática. No puede comprarse con un soborno ni transfundirse. La única manera de conseguirla es dedicándole tiempo y recursos.

Ciertas personas tienen predisposición y pueden desarrollarla instintivamente en un tiempo relativamente corto a partir de nociones tácitas. Otras tienen que invertir tiempo y dinero y estudiar y practicar mucho. Pero todos los que la cultivan disfrutan de sus beneficios.

Mucho se dice de la libertad de expresión en un sentido periodístico, pero una persona que siente miedo de exponer un tema, o que se bloquea hasta el punto de no poder hablar sin juntar permanentemente las manos, esconderlas en los bolsillos, agarrar un lápiz o aferrarse a una mesa, tiene un problema no resuelto con su propia libertad de expresión.

Cuando uno verdaderamente siente que goza de libertad de expresión no cae en manerismos aburridos ni necesita juntar las manos a cada rato o esconderlas en los bolsillos. ¡Se siente cómodo! ¡Usa sus manos con entusiasmo, ilustrando naturalmente los pensamientos que brotan de su alma!

Por eso, la libertad de expresión tiene que brotar y comenzar en tu corazón, Las técnicas de oratoria te permiten cultivar y desarrollar todas sus cualidades humanas para alcanzar y sentir el placer de tu verdadera libertad de expresión.

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